Las diferencias en las filas libertarias locales por los despidos y cierres de organismos nacionales se inscriben en un contexto general de desconcierto.
El presidente del bloque de diputados, Adrián Brizuela, respaldó las medidas con duras críticas a los exjerarcas de la ANSES provincial que se cubrieron con la planta permanente antes dejar sus puestos, respaldado por su par Federico Lencina.
«Yo no estoy de acuerdo con los despidos y ceses en funciones. Se pone en situación de incertidumbre a muchas familias catamarqueñas. Son decisiones que vienen del Gobierno nacional; hay que diferenciar lo que es el gobierno nacional y provincial. Los gobernadores deben estar preocupados, no son ajenos, no creo que nadie pueda estar contento porque un comprovinciano pierde su fuente laboral. No todos son ‘ñoquis’. Conozco casos de personas que cumplen sus funciones y en esto también entra una paradoja por parte de la sociedad, que cree que todos son ñoquis y cobran un sueldo sin prestar funciones y eso no es así. Yo conozco gente que trabaja», consideró.
Un matiz similar marcó el concejal chacarero Franklin Medina.
«Me parece que deberíamos buscar consenso, diálogo, estamos distantes. Mi opinión es que no es lo mismo determinar en Buenos Aires que vivir en Catamarca. Hay organismos que cumplen funciones importantes, yo soy de la idea de que no deberían desaparecer. Creo que deberíamos plantear que algunas situaciones se analicen en el territorio. No estoy obteniendo respuesta. Me queda la impresión de que se decide en un décimo quinto piso y hace rato ya que tendríamos que mostrar cómo es Catamarca», analizó.
Esta fisura viene precedida por las disputas que se produjeron en Catamarca por el control del Partido Libertario, en el marco de la interna entre el legislador porteño Ramiro Marra y el diputado nacional Nicolás Emma por la conducción nacional. Marra incluso hizo una fugaz visita a Catamarca y logró un pronunciamiento formal del Partido Libertario local a favor de sus pretensiones, tras una serie de cruces por la titularidad del sello.
Luego fue designado el dirigente Pablo Agüero, del partido UNITE, como jefe de la ANSES provincial. La exdiputada nacional Myriam Juárez sería la jefa regional de Catamarca y La Rioja, pero esto aún no está confirmado.
El trasfondo es la clausura de organismos nacionales que aspiraban a ocupar los libertarios de primera hora y los macristas y radicales que se les plegaron luego de la derrota de Patricia Bullrich en la primera vuelta. Aparte de los atractivos sueldos, son considerados herramientas de primer orden para la construcción política que el programa de ajuste de la Casa Rosada arrebata a sus dirigentes provinciales.
En tal sentido, provocó estupor la designación al frente del PAMI, en reemplazo del extinto Horacio Almada, del joven médico Iván Rodolfo López, que es para los libertarios catamarqueños un perfecto desconocido y no registra antecedentes de militancia en el sector. Nadie pudo, o quiso, dar razones del nombramiento, que se digitó a nivel nacional.
Los libertarios intuyen que la movida podría venir por el lado del clan Menem, en el que Javier Milei habría delegado la organización de la estructura del interior de cara a las elecciones legislativas del año que viene. El presidente de la Cámara de Diputados Martín Menem, hijo de Eduardo y sobrino del expresidente Carlos, y su tío Eduardo “Lule”, que se ha convertido en la mano derecha de Karina Milei, capitanean el armado, del que todavía no hay un referente oficial en la provincia.
Sin línea nacional clara, los referentes provincianos buscan ganar visibilidad y protagonismo hacia el próximo litigio, en el que no estará Milei traccionando desde la candidatura presidencial. En ese marco, el empresario Javier Galán, que quedó afuera el año pasado, comenzó los trámites para anotar su propio partido: “Unión Libertaria”.
