VÍCTIMA DE APREMIOS POLICIALES
El efectivo continuaría en funciones como personal de calle. La víctima criticó a la Jefatura. Pidió que la causa vaya a juicio.
Un hombre de apellido Barrionuevo, que denunció a dos efectivos policiales por apremios en el año 2019, informó que al menos uno de ellos continúa trabajando en la Policía, a pesar de estar sumariado y haber sido pasado a disponibilidad.
Se trata del oficial Jesús Abel Rivas, quien está imputado por la presunta comisión de los delitos «privación abusiva de libertad personal» y «severidades», por arrestar a quien en ese momento era pareja de su expareja.
En diálogo con este diario explicó que «hace poco más de una semana el policía subió a mi remís y no me reconoció por el barbijo y las cosas que hay en el auto para prevenir contagios por la pandemia. No podía creerlo porque supuestamente lo habían puesto en disponibilidad».
Consideró que «no puede ser que siga en funciones a pesar de que me agredió y me subió a un móvil, cuando estaba en la casa de su expareja en el 2019, y después me metió en un calabozo y me golpeó al tiempo que me invitaba a pelear con él».
Manifestó que si bien conoció que había sido reincorporado por el jefe de Policía, Ángel Agüero, también supo por este medio que días más tarde a esa medida y por orden del ministro de Seguridad, Gustavo Aguirre, debía haber sido pasado a disponibilidad nuevamente.
«Pero parece que eso no pasó, por eso lo vi y está trabajando. La verdad es que no se entiende», agregó.
Además remarcó su preocupación por las demoras en la instrucción de la causa, a cargo del fiscal Hugo Costilla, y adelantó que
analiza con su familia las posibilidades para pedir construirse como querellante particular.
«En los próximos días tendré que definir eso, para tener acceso al expediente y hacer que la causa avance», indicó.
«No entiendo por qué el jefe de Policía tiene a este tipo de personas trabajando, en funciones. Porque además de lo que me hizo y por lo que lo denuncié, él la amenazó a la mujer, que en ese momento era mi pareja, y por temor y el malestar que generó decidimos dar por terminada la relación. Y eso no puede ser», finalizó.
Rivas, junto con otro policía de apellido Vega, fue imputado a principios de diciembre de 2019.
Según la denuncia, los dos efectivos y otros numerarios concurrieron a la casa de la expareja de Rivas a fines de noviembre de ese año. La mujer y Barrionuevo estaban en la vereda y fueron abordados por los policías.
Rivas le pidió a Barrionuevo los papeles de una moto que estaba en el lugar y lo arrestó. Presuntamente luego lo alojó en un calabozo donde ocurrieron los apremios.
Tras la denuncia penal la Policía inició una investigación administrativa y al ser imputado pasó a disponibilidad.
A fines de julio, junto con varios efectivos en disponibilidad, fue reincorporado a la fuerza como personal de calle en la Comisaría Primera, donde continuaría trabajando.
La reincorporación de los policías investigados por causas penales fue anulada días más tarde por el ministro Aguirre, por lo que todos deberían haber vuelto a estado de disponibilidad.
Como antecedente, en 2016 Rivas agredió y arrestó a un reportero gráfico que realizaba la cobertura de un accidente vial en la ruta nacional 38.