LA CAUSA TIENE A DOS HERMANOS IMPUTADOS
El juez Morabito rechazó la oposición de la defensa. La familia protestó por la liberación del mayor de los acusados.
“Hay otras personas que se mandaron una macana como ésta y están en la cárcel. ¿Quién es éste para que esté afuera?”. Carmen “madre del corazón” de Gonzalo Moreno no entiende por qué el juez Rodrigo Morabito le otorgó el viernes la excarcelación al mayor de los hermanos que está acusado de haberle disparado en la cabeza a su hijo la madrugada del 28 de agosto de 2022. Esta incomprensión de la medida, sumada a la impotencia tras remover lo ocurrido hace casi diez meses, llevó a que la familia Moreno y los amigos de Gonzalo fueran hasta el Tribunal Penal Juvenil (TPJ) a manifestarse y pedir que el sujeto identificado como A. sea nuevamente detenido y trasladado al penal de Miraflores.
El viernes 30 de junio, en una audiencia realizada en el poco habitual horario de la noche, Morabito hizo lugar al control jurisdiccional que había ingresado por pedido de la defensa, poco antes de las 13. Pedro Vélez había pedido la excarcelación para A. por vencimiento de la prisión preventiva de diez meses que se le había dictado el año pasado. El fiscal penal juvenil, Guillermo Narváez, pidió en plena audiencia una prórroga, la cual fue desestimada por el juez.
«No tengo argumentos suficientes como para seguir manteniendo la prisión preventiva. Esta prórroga, que interpreto debe conceder la Corte de Justicia y que hoy (por el viernes) solicita el señor fiscal (Guillermo Narváez), que también la podría haber solicitado antes ante la inminencia del vencimiento del plazo», argumentó.
El mayor de los hermanos fue liberado pero le fijaron restricciones. Una de ellas es la prohibición de salir de su domicilio entre las 20 y las 8. “Son fuertes restricciones que va a tener que cumplir, sino será detenido”, le advirtió Morabito.
El fallo provocó el descontento de la familia Moreno y motivó que decidiera salir a la calle con dirección a Chacabuco al 300, en donde está el edificio del TPJ. El tránsito fue cortado por la policía en Ayacucho y Chacabuco, eran cerca de las 11. Familiares de Gonzalo más amigos con camisetas y bombos del club Villa Cubas cantaban y pedían justicia. Desde un megáfono, una chica le exigía al juez Morabito que los reciba. El pedido se hizo escuchar ya que un policía de la consigna le informó a Carmen que sería recibida por Morabito.
Puertas adentro el juez Morabito debía resolver otro planteo. Luego que el fiscal penal juvenil, Guillermo Narváez, finalizara el dictamen de elevación a juicio, Pedro Vélez, abogado de los acusados, planteó la nulidad y pidió que A. sea juzgado por un delito más leve.
Vélez sostuvo que la acusación era “arbitraria” y “perjudicial” para los imputados y sugirió que el caso podía encuadrarse como “homicidio en ocasión de riña” o “legítima defensa”. En relación con esto último indicó que los hermanos estaban en su domicilio y fueron objeto de una agresión por parte del otro grupo.
En referencia a la hipótesis de la riña dijo que se trató de un enfrentamiento entre dos bandas que tienen un viejo historial de conflictos en el barrio Mil Viviendas y San Ramón.
Morabito rechazó el planteo defensivo y confirmó la elevación a juicio de la causa. “El origen de la agresión ilegítima y provocación suficiente se inició, reitero con énfasis, con el ataque del día 28 de agosto del año 2022 a horas de la madrugada por parte de los hermanos junto a otras personas, por lo que la legítima defensa alegada por la defensa no puede prosperar”, señaló.
A su vez desestimó el pedido del homicidio en riña en base a los testimonios.
«Los testimonios han sido determinantes (tal como lo sostuvo la fiscalía especializada) al afirmar que si bien ambos hermanos dispararon con armas de fuego (…) surge de un modo claro que quien efectuó los disparos mortales contra Moreno fue A., que utilizó un arma de fuego de alto poder», concluyó.
Morabito remitió la causa a la Oficina de Gestión de Audiencias (OGA) para que se realicen los trámites pertinentes para el juicio por jurados.
«Cuando juegue Villa Cubas yo te voy a recordar»
El grupo llegó al edificio del TPJ a las 10. Se había reunido en el barrio San Ramón y caminó hasta el centro. Un grupo de motorizados de la Policía cortó el tránsito en calle Ayacucho y Chacabuco.
«Siempre vivirás en el corazón de tu madre del corazón, de tu tío y de tus hermanos. Siempre lucharemos para que tus asesinos vayan a la cárcel de por vida», decía una de las pancartas que se mostraron frente al edificio judicial.
Con gritos y ruido de bombos, los amigos pedían ser atendidos por el juez Rodrigo Morabito. Eso finalmente ocurrió pero antes, Carmen, «la madre del corazón», se descompensó y tuvo que ser atendida por el SAME.
Finalmente dos familiares ingresaron al despacho de Morabito, quien les explicó las razones por las que fue liberado A.
«Quiero pedir perdón al juez», dijo Roly, un tío de Gonzalo, que minutos antes había insultado a Morabito por el fallo del viernes.
«Para nosotros ha sido un golpe, una muerte equivocada. Hace poco había venido de Córdoba porque estaba internado con un problema de adicción», agregó.
Tras la novedad de la confirmación de la elevación a juicio, los manifestantes se calmaron y se marcharon cantando «Gonza, mi buen amigo, aunque te fuiste siempre estarás conmigo… Cuando juegue Villa Cubas yo te voy a recordar».