El Ministerio de Seguridad de la Provincia, informó que se realizaron modificaciones desde la perspectiva de género en los requisitos para quienes buscan ingresar a la Escuela de Cadetes “Tte. Gral. Juan Domingo Perón”.
En este sentido indicaron que estos cambios «expresan la convicción del nuevo equipo de conducción de las fuerzas de seguridad de producir cambios que le permitan a la institución policial seguir adaptándose a las nuevas demandas de las sociedad»
El Jefe de Policía Lic. Ángel Agüero informó que en cuanto al cambio en los requisitos de admisión, esta es la primera vez que se habla de personas, dejando de lado la expresión de sólo hombres y mujeres, e incluyendo a todas las identidades de género que puedan tener interés en ingresar a las fuerzas policiales.
También podrán inscribirse las personas que estén casadas y/o tengan hijos, ya que las autoridades consideran que estas exclusiones tenían carácter discriminatorio, aunque al tratarse de un régimen de cursado con internado los dos primeros años, se exige plena disponibilidad horaria.
Por otro lado se flexibilizó el requisito de prohibición de tatuajes, dando la posibilidad de ingresar a personas que tengan los mismos en su cuerpo, «teniéndose en cuenta solo que no estén visibles en extremidades superiores e inferiores, cráneo, rostro y cuello, y que en el caso de tenerlos no sean ofensivos, no hagan apología al delito, o sean obscenos o temerarios».
Otro cambio es referido al rango etario que se amplía el límite de edad de 18 a 25 años, cuando antes solo se admitía hasta los 21 años ya que consideran que, hay personas que cuentan con otros estudios superiores y quieren sumarse a la fuerza, contribuyendo a la profesionalización y especialización de la policía.
El ministro de Seguridad Gustavo Aguirre, destacó el trabajo que vienen realizando las autoridades del IES policial para poder iniciar este nuevo ciclo lectivo en un contexto tan difícil, y en particular, agradeció la posibilidad de compartir la visión que tenemos sobre el futuro de la policía, interpretando la necesidad de implementar cambios dentro de la institución que nos acerquen a cada vez más a la sociedad y a los nuevos tiempo que vivimos, no solo en cuanto a los cambios en los requisitos de ingreso, sino también, en la actualización de los programas de estudios que se vienen planificando.
Hoy tenemos un gran desafío, que es buscar compatibilizar la apertura a las nuevas perspectivas sociales, con las particularidades, exigencias y características propias de la formación y la actividad policial, que demanda riesgos, compromisos horarios y esfuerzos físicos y emocionales que la diferencian de otras carreras o profesiones. Iremos logrando el equilibrio con el correr del tiempo.