FUERTE REVÉS JUDICIAL PARA LA DEFENSA
Será sometido a juicio por jurados. El juez director rechazó un pedido de nulidad por «improcedente».

El juez director de juicio por jurados al que será sometido Walter David Correa (21) por el crimen de Alejandro Tomás Moreno (22), alias «Papelito», rechazó el planteo de nulidad presentado por la defensa del sospechoso.

El magistrado Silvio Martoccia calificó de «improcedente» el cuestionamiento realizado por el defensor Ramón Porfirio Acuña, quien acusó por «irregularidad procesal» a la fiscalía interviniente, asegurando que no fue notificado formalmente de la citación a juicio.

Para Acuña, «dicha omisión, grave, por cierto, impidió a esta defensa y a mi defendido Correa conocer el contenido de la acusación fiscal y en consecuencia los fundamentos de la referida pieza requirente, como así la posibilidad de impugnación de la misma, lo que implica de manera inevitable una clara violación del debido proceso legal y a las garantías previstas».

Por otra parte, recordó que asumió el cargo de defensa a mediados de abril y que «nunca» tuvo acceso a las actuaciones del caso. Sobre el planteo, el Ministerio Público Fiscal sostuvo que no debía ser aceptado ya que esa defensa recibió notificaciones anteriores, entre ellas la citación a audiencia de prisión preventiva, a la cual concurrió evidenciando que «se trata de un planteo de nulidad por la nulidad misma».

Moreno está detenido con prisión preventiva, procesado por “homicidio simple” que prevé pena de entre 8 y 25 años de prisión.

Se lo acusa de apuñalar a Moreno el 17 de marzo causándole una grave herida en el pecho que le causó la muerte la madrugada del domingo 17 en la terapia intensiva del Hospital San Juan Bautista. El informe de la autopsia confirmó que el deceso ocurrió por una lesión mortal en la zona de la vena subclavia y vena cava superior.

El ataque tuvo lugar en barrio La Tablada, en un inmueble de calle Río Salado, entre Caseros y Ayacucho.

Los investigadores sostuvieron que el móvil del crimen fue una deuda que tenía la víctima con el único imputado. En este punto, al momento de realizarse la audiencia de control de detención, el fiscal que investigó el hecho, Jonathan Felsztyna, dejó en claro que Correa tuvo la intención de atentar contra la humanidad de Moreno.

“Empuñando un arma blanca, Correa se acercó a Moreno, quien se encontraba sentado en una vereda en esa cuadra. El mismo, con claro ánimo de atentar contra la vida de Moreno, Correa procedió a aplicarle una certera puñalada en la zona de la región pectoral derecha. Producto de esta única puñalada que le aplicó, la víctima padeció un hemotórax masivo», dijo e fiscal.

Se supo además que en sus declaraciones testimoniales, varios vecinos declararon que vieron el antes, durante y después de la escena, “dando cuenta de que efectivamente el atacante fue Correa, quien era conocido en el vecindario. «Él se acerca a la víctima y le aplica esta certera puñalada”, aseveraron los investigadores.

Por su parte, Acuña había dicho que existen varias versiones sobre el hecho y que una de ellas advierte que hubo un enfrentamiento entre los dos jóvenes.

«Hay una versión que dice que hubo una pelea (entre Correa y Moreno)”, señaló haciendo hincapié en que Correa habría intentado defenderse “ante una reacción de la víctima”.

Querella
La familia de Moreno cuenta con el patrocinio legal de Silvia Barrientos, quien se constituyó en querellante particular. “Éste es un homicidio querido por el imputado. Los testimonios son claros y contundentes. El día del hecho, Correa lo buscaba para asesinarlo. Era premeditado, planificado. No fue un homicidio que se dio por una reyerta, por una discusión. Él lo andaba buscando para matarlo. No hay justificaciones para un hecho de semejante naturaleza», aseveró.

«Papelito» tuvo incontables ingresos en las comisarías, sobre todo en las del sur de la Capital. En el barrio muchos lo estimaban y consideraban «un chango bueno». Tenía graves problemas de adicción a drogas y alcohol.

A mediados de noviembre del año pasado se trabó en lucha con Oscar Eduardo Astrada (44), también en el barrio La Tablada, a quien le arrancó un ojo con el cuello de una botella de vidrio rota.

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