En la cámara de diputados
El PRO, el MID y dos diputados radicales acompañaron al bloque oficialista que necesitaba de los dos tercios de la Cámara para aprobar el proyecto, que incluye la toma de un crédito.
En un largo debate de más de ocho horas, la Cámara de Diputados dio su media sanción al Presupuesto General de la Provincia, al Presupuesto Legislativo y a la Ley Impositiva 2025.
La iniciativa que más tiempo tuvo de debate fue el del Presupuesto provincial (más de $2 billones), donde el oficialismo consiguió los dos tercios de la Cámara para su aprobación. Fue gracias al acompañamiento de los dos diputados del PRO Enrique Cesarini y Natalia Saseta; del diputado del MID, Fernando Baigorrí, y sorpresivamente de los dos radicales Carlos Marsilli y Cristina Gómez, que el bloque del Frente de Todos-Unión por la Patria consiguió los 26 votos necesarios para alcanzar la mayoría especial que necesitaba el proyecto para ser aprobado. El bloque oficialista tiene 22 miembros.
En la previa del debate, el bloque de la UCR venía advirtiendo que el Presupuesto 2025 debía aprobarse con esa mayoría calificada por tener dentro el pedido de autorización de un empréstito de $138 mil millones para la realización de un plan de obras. Este planteo fue llevado al recinto por el presidente de la UCR, Alfredo Marchioli. «La Constitución de la provincia es clara, nosotros tenemos la facultad de autorizar el empréstito pero no con una mayoría simple, sino con una mayoría calificada más cuando la solicitad es la emisión de títulos o bonos públicos a mediano o largo plazo», dijo el legislador quien pidió responsabilidad «para no cometer errores».
El diputado peronista Juan Carlos Ledesma fue quien rechazó el cuestionamiento radical. «El año pasado se aprobó con total normalidad el presupuesto incluso con los votos de los diputados de la oposición, que en su mayoría están presentes hoy», dijo. «No se entiende qué pasó que cambiaron la posición del año pasado. En esa oportunidad también se pedía un empréstito», añadió.
En medio de la discusión Marsilli y Gómez habían adelantado que iban acompañar el proyecto del Gobierno, lo que hacía suponer que el oficialismo iba a conseguir los dos tercios de los votos. Marcilli lo hizo destacando el plan de obras propuesto por el Gobierno, donde varios proyectos están previstos para la región del Oeste, de donde es oriundo. «En virtud de defender el crecimiento de todo el Oeste voy a acompañar en general este proyecto», dijo. Gómez, por su parte, justificó su acompañamiento al sostener: «Mi voto no es un cheque en blanco, sino en beneficio de la gente».
Casi al cierre del debate, Cesarini del PRO tomó la palabra y justificó el acompañamiento de su espacio al indicar: «Podemos compartir la prioridad o no, pero compartimos que es necesario que la Provincia cuente con un presupuesto».
Por su parte, Baigorrí del MID sostuvo: «Es importante dar previsibilidad a la sociedad catamarqueña y es por eso que esta vez voy a acompañar el presupuesto».
El bloque libertario optó por no votar el proyecto del Gobierno. En este sentido, su presidente, Adrián Brizuela, cuestionó que el presupuesto «es deficitario y que el plan de obra no especifica cómo se realizará».
«No es un presupuesto equilibrado y austero que evite los gastos de la política», dijo el legislador.
El debate tuvo su momento más álgido al tiempo de la votación, cuando la UCR pedía votación nominal, mientras el oficialismo pedía votar en general. Haciendo uso de su mayoría, el bloque FT-UP ganó la pulseada y se votó en un solo acto.
Media sanción a la Ley Impositiva
El debate sobre la Ley Impositiva también se llevó a cabo en torno a dos despachos. Uno por la mayoría del oficialismo y uno por la minoría del bloque de la UCR.
La presidenta de la Comisión de Hacienda, Mónica Zalazar, defendió el despacho de la mayoría, al explicar que la iniciativa actualiza el marco tributario, proponiendo ajustes en la base imponible de los impuestos Inmobiliario y Automotor, además de incluir incentivos fiscales y descuentos por pago anticipado. «Este proyecto representa una actualización del marco impositivo atendiendo a las necesidades económicas actuales y promoviendo principios de equidad, eficiencia y sostenibilidad fiscal», dijo.
Desde la oposición, consideraron que su despacho (de minoría) reducía el impacto tributario en los contribuyentes. En este sentido, legisladores del PRO y la UCR consideraron que el proyecto tenía una mayor presión impositiva, mientras que La Libertad Avanza rechazó la creación de nuevos tributos.
A pesar de las objeciones, la Ley Impositiva fue aprobada aunque solo con el respaldo del bloque oficialista.